viernes, 21 de octubre de 2011

Un nuevo concepto de firma.

Siempre se ha querido identificar o aprobar un documento a través de la firma de la propia persona que lo redactó, pero a medida que han ido avanzando los tiempos la firma ha ido evolucionando con las nuevas tecnologías.

El desarrollo de las redes en internet ha facilitado el intercambio de información, el tráfico comercial y administrativo entre personas muy separadas geográficamente.
Para que estas personas tan separadas puedan intercambiar mensajes por la red, estos deben cumplir algunos requisitos:
-el mensaje debe tiene que ser atribuido a la persona que lo envió. (Identidad).
-tener certeza de que el mensaje recibido exactamente igual al enviado por el emisor. (Integridad).
 -el emisor no puede negar haber enviado el mensaje, si este incorpora su firma digital. (No repudiación).


En la siguiente imagen podemos ver el funcionamiento de la firma digital: 
  el emisor envía un mensaje electrónico con un código hash, es decir, cifra el mensaje con un código, que es la firma digital.
 El receptor recibe el mensaje cifrado y el certificado digital , es decir, los datos del emisor.
El receptor descifra el certificado digital utilizando una clave pública. Esta clave se utiliza también para descifrar el hash. Una vez descifrado el hash el receptor necesitará la clave privada para descifrar finalmente el mensaje.
Finalmente el emisor compara el mensaje cifrado con el mensaje no cifrado para ver si son iguales y comprobar así su autenticidad.

















 Foto

Añadir que España es el país con un mayor número de firmas electrónicas y de DNIe, supera los 12 millones de firmas y los 10 millones de DNIe. Más información

 En mi opinión es mucho más sencillo enviar un correo de forma clásica ya que no necesitas tantas claves y es igual de eficaz, aunque tarde algo más de tiempo. Me parece increíble como ha cambiado todo y hasta una simple firma a evolucionado tanto en los último tiempos.

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